Respuesta a: Semana 3 – Los periodistas en la mira

Un cordial saludo para todos y todas.

Un caso conocido y que viene de muchos años atrás, es el del periodista Daniel Coronell, quien desde el año 2002, ha sido objeto de interceptación, hostigamiento, amenazas de muerte, injurias y perfilamientos por su labor periodística, la cual se ha encaminado a hacer investigación, cuestionamiento y denuncia por actuaciones de Álvaro Uribe Vélez. Esto lo llevó a exiliarse, sin embargo, el acoso y hostigamiento continúa. De hecho, las afirmaciones del expresidente en este caso, han generado sanción social hacia el periodista. El hecho más reciente ocurre en marzo de este año: a través de su cuenta de Twitter, el expresidente Álvaro Uribe acusa al periodista de ser “financiado por el narcotráfico, de cometer delitos y de hacer periodismo sesgado”.

En el mundo, si más periodistas cedieran ante la intimidación, quedaríamos expuestos a no tener conocimiento de lo que sucede a nuestro alrededor, lo que ocasionaría una manipulación general a la información y al conocimiento mismo. La labor periodística en el contexto actual, debe tener todo el respaldo de la sociedad, pues los periodistas hacen una labor de cubrimiento, rastreo e investigación, para que la información que brindan sea confiable y veraz. Son una especie de filtro en el actual bombardeo de información.

Reflexión: Frente a los muchos casos expuestos por los compañeros y las evidentes estadísticas, podría afirmar que, aunque obviamente son casos diferentes, la esencia es la misma: callar y bloquear la difusión de la información y el conocimiento. En este sentido no hay diferencia entre uno y otro caso. Ninguno es más o menos importante. Frente a esto, valoro la labor de los diferentes periodistas, quienes, a pesar de las intimidaciones, siguen adelante siendo la voz de sus comunidades o siguen su lucha para que otros estemos informados y formemos criterio.

Desde las aulas, la educación debe encaminarse a valorar la información que se brinda de manera honesta, se debe reconocer el esfuerzo de los periodistas objetivos, serios, que se preocupan realmente por entregar un informe o noticia producto de la investigación y en el marco de la ética profesional.