Respuesta a: Semana 3 – Los periodistas en la mira

[paula-alexandra-caceres-garzon]

El caso que tome como base para la actividad consiste en una situación que se presentó en el 2018 con los periodistas Alberto Castaño y María Lourdes Zimmermann. Estos periodistas desarrollaban informes periodísticos sobre el medio ambiente (asesinatos de líderes ambientales, deforestación, quemas de bosques en Guaviare y Meta…) motivo por el cual fueron intimidados de diferentes maneras.

El tipo de intimidación que sufrieron fue la amenaza: en primer lugar, recibieron una amenaza a través de la red social “Twitter” en la que un usuario les exigía salir del lugar en el que se encontraban realizando las denuncias, en el que le señalaban que la naturaleza era para explotarla y  en el que señalaban la ubicación del periodista indicando que lo tenían vigilado; en segundo lugar, mientras el periodista estaba en un café recogiendo información de una fuente primaria, pasó una persona mostrándole un arma; y, en tercer lugar, fue interceptado por un motociclista que lo amenazó de muerte, y siguieron a su familia. Por último, las consecuencias que tuvo para los periodistas fueron el exilio y la continuación de intimidaciones por parte de delincuentes a través de las redes sociales. Además, las consecuencias para la sociedad implicaron la continuidad de estos actos delictivos que afectan la fauna y flora del país.

A partir del caso anterior y de lo visto durante el desarrollo del diplomado es importante reflexionar en torno a la siguiente pregunta: ¿Qué crees que podría pasar en el mundo si más periodistas cedieran ante la intimidación en lugar de continuar con su trabajo frente al peligro?

Pues bien, el riesgo que puede traer al mundo el hecho de que los periodistas cedan ante la intimidación es, principalmente, el desconocimiento de problemáticas de diferentes ámbitos (políticos, sociales, culturales, deportivos, ambientales…), lo cual llevará a una visión errada e incompleta de la realidad, que no posibilitará solucionar los problemas de las comunidades ni avanzar como sociedad. Si tenemos periodistas que caen en la autocensura por culpa de las intimidaciones y la impunidad frente a estas, no podremos informarnos y evitar tragedias como la deforestación o la quema de bosques como el caso mencionado líneas atrás.

Adicionalmente, en una perspectiva muy apocalíptica, si los periodistas ceden ante la intimidación se podría llegar a la terminación o cierre de una profesión de vital importancia como lo es el periodismo y/o comunicación social. Esto puede conllevar a que los periodistas puedan ser reemplazados solo por presentadores que tengan el papel de difundir la información que solo le conviene a quienes están en el poder. Es decir, puede llevar a que solo prevalezca una versión de la realidad, que no es completa, profunda ni basada en la investigación.

En este sentido, es necesario que se fortalezcan las medidas para proteger a los periodistas del mundo, que se ven afectados por intimidaciones de cualquier tipo, las cuales impiden desarrollar su labor. Lo anterior, porque no se trata de que el periodista continué su trabajo enfrentándose al peligro, sino que continué su trabajo porque su rol es de vital importancia en la sociedad y este debe tener las herramientas, espacios y seguridad necesaria para ejecutar sus funciones.

Reflexión sobre el caso:

El caso mencionado anteriormente nos permite tener el panorama al cual se enfrentan los periodistas en Colombia. La amenaza, lastimosamente, se ha vuelto el asunto común en esta profesión, lo cual es muy grave y necesario de erradicar. Pero, ¿Cómo evitar que la labor del periodismo se vea afectado por amenazas y exilio como el caso de los periodistas Alberto Castaño y María Lourdes Zimmermann? La única forma posible es a través de la educación mediática y las medidas de prevención, atención y seguimiento a casos de persecución a periodistas. Primero, la educación mediática posibilitará que desde la escuela entendamos la labor del periodista para respetarla, valorarla y cuestionarla cuando sea necesario, pero sin caer en las intimidaciones. Segundo, las medidas de prevención, atención y seguimiento a los periodistas en su labor investigativa evitará que se presenten más asesinatos, evitará exilios ya que se garantizaría la protección de cada persona que ejerce el periodismo.

Fuente del caso expuesto: https://flip.org.co/en/pronunciamientos/por-amenazas-contra-su-vida-dos-periodistas-ambientales-se-encuentran-exiliados

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